Tuber brumale, pulpa obscura, odora P. Micheli (1729), Nova Plantarum Genera 221, t. 102
Tuber gulosorum (Scopoli) Pico (1788), Melethemata Inauguralia. De fungorum generatione et propagatione 79
Tuber nigrum Bulliard (1788), Herbiér de la France t. 356
Tuber cibarium nigrum Bulliard (1791), Histoire des Champignons de la France 74
Tuber cibarium Persoon (1801), Synopsis Methodica Fungorum 126
Tuber cibarium Bulliard: Fries (1823), Systema Mycologicum 2, Pt. II: 290
Tuber gulonum (Corda) Paoletti (1889), in Saccardo Sylloge Fungorum 8, 894, sin ilustración
Ascoma: hipogeo, redondeado o irregular dependiendo del terreno donde crece. En suelos sueltos, donde no tiene ningún obstáculo para crecer, adquiere una forma redondeada. En suelos pedregosos su crecimiento se dificulta por las piedras y adopta formas muy variadas. Tamaño de 1 a 10 cm., aunque se han encontrado ejemplares de más de 2 kg. de peso.
Peridio: adherente a la gleba. Color marrón negro, inicialmente rojizo. Verrugas de 3-5 mm de anchura en la base, piramidales, de 4-6 caras, con un mayor desarrollo cuanto más suelto es el terreno, deprimidas en el ápice y fisuradas radialmente
Gleba: de color blanco cuando es inmadura, negro violáceo cuando termina de madurar. Venas blancas, finas, numerosas y muy ramificadas, que enrojecen con el aire cuando la trufa está bien madura. Si la trufa se hiela, estas venas desaparecen.
Consistencia: firme, carnosa
Olor: muy intenso, característico, sorprendente y no siempre agradable para todas las personas.
Sabor: muy intenso, persistente, algo amargo
Comestible excelente tanto en crudo como cocinada.
Suelos calizos bien drenados, bien aireados y porosos. Es importante que sean ricos en calcio y que el pH sea alcalino. Las lluvias deben estar bien repartidas durante todo el año y son fundamentales las tormentas de julio y agosto para su fructificación. Tuber melanosporum gusta de exposiciones soleadas, inhibiendo el crecimiento de plantas y formando "quemados". Madura en invierno, de diciembre a marzo. Se puede asociar a numerosos árboles: quercus, chopos, sauces, avellanos, tilos, carpes, pinos. En España la mayor producción se da en encinas, quejigos y avellanos. Se cultiva con éxito aunque los rendimientos son muy variables.
Las truferas naturales de Tuber melanosporum se van extinguiendo y la mayor parte de las trufas que se encuentran en los mercados procede de plantaciones artificiales. Su cultivo se ha extendido a países donde la Tuber melanosporum no crecía de forma natural. La primera Tuber melanosporum recolectada fuera de Europa se consiguió en California en 1991. Nueva Zelanda lleva algunos años recolectando comercialmente Tuber melanosporum (las primeras trufas en 1993) y Chile ya ha conseguido sus primeras trufas en el 2009.
Ascos: globosos, sésiles o cortamente pedunculados, de 70-80 x 50-70 µm, con 1-5 esporas en su interior (generalmente 3-4 esporas).
Esporas: marrón oscuras, opacas cuando están completamente maduras. Tienen una forma elipsoidal y están decoradas con espinas muy puntiagudas, a menudo curvadas, de 2-3 (5) µm, que se pueden unir por la base para formar pequeñas crestas. Tamaño muy variable, de 28-48 x 20-30 µm (Q=1,5-1,8), dependiendo del número de esporas contenido en el asco.
Peridio: pseudoparenquimatoso
Antonio Rodríguez trufamania@gmail.com antonio@trufamania.com |